Posada Gotan

I cannot sing enough praises about Thibaud and his wife, Gabriela, as well as Thami. While this place is a boutique stay, it is extremely comfortable and hospitable. I came in super late and Thami welcomed me warmly. Despite the language barrier, she ensured I was comfortable, gave me a much needed glass of water, and showed me to my room. The next morning, I had the pleasure of meeting Thibaud and Gabriela, who were extremely pleasant and friendly. Good lord, Thibaud's scrambled eggs are to die for - I was blown away by each bite and it's something I would love to replicate. I had read some reviews about the place being very strict but I don't know - I had a very pleasant stay and felt very welcomed and well taken care of. But the highlight is the efforts Thibaud and Gabriela took to ensure I got to the airport safely and on time. When I had an issue with ordering a cab through Cabify, they arranged a taxi for me for a good rate, and Thibaud even came out of the hotel and spoke to the taxi driver and told me how much I need to pay and what to expect in return. Really wonderful experience and I will certainly be back (hopefully without inconveniencing them too much this time).

Excelente todo ! Hermoso lugar, la atención, la ubicación, y el desayuno increíble. El lugar está cuidado muchísimo, es muy tranquilo y hay lugar para estacionar en la cuadra. Los dueños con amorosos. Y todo está muy cuidado y prolijo. Mil puntos

Hermoso lugar. Fuimos por una noche, super tranquilo. Al día siguiente teníamos un vuelo desde Ezeiza por lo que la ubicación es excelente, re cerca del aeropuerto. El personal super amable y profesional. Desayuno top top top 😍 de seguro volvemos! Lo super recomiendo. 🤩

Recomendable al máximo. Atención exquisita por parte de Thibault. Y no digamos el desayuno: Pan y mermeladas caseras y una mantequilla y un café del Salvador ... humm... Cuando vuelva a B. Aires ya sé a dónde ir.

Los espacios son diminutos. Todo muy chic, pero no es amable . Hay una sola mesa donde se come (para todos los huéspedes) en un lugar sin ventanas . la atención permanente parecía más bien vigilancia permanente. Los dueños son arbitrarios : te dan jabón si,pero champú no. Te sirven comida casera pero escasa…Te dicen:Toma agua del dispenser, pero no puedes entrar a la cocina de noche, donde está el dispenser!. Y te explican:Aquí todo es orgánico… y se puntual… y silencioso… que te quede claro que esto es un hotel muy especial… en fin .No lo recomiendo.