Sin duda lo que puedo destacar de mi estancia en este hotel fue la ubicación, le daría 5 estrellas, pues está a dos minutos de la plaza de Taksim y , por tanto, muy muy cerca de la calle más comercial y una de las más concurridas de Estambul. Igualmente muy cerca de boca de metro, funicular y, por tanto muy fácil conexión al transporte público para poder llegar a cualquier punto de la ciudad. En relación a la habitación, la cama era muy cómoda, la limpieza era buena y el baño, aunque no destacaba por ser grande, fue lo necesario. Al fin y al cabo a Estambul no se va para estar en el hotel y fue lo adecuado para descansar. El único punto que me hubiera gustado mejorar fue el desayuno, no disponían de buffet y te entregaban un plato preparado, con lo que aquello que te gustaba menos no podías no seleccionarlo. Su personal fue amable.
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