Casa Rural Santa Ana

La casa está muy bien, es grande con un jardín muy bonito y una piscina grande. Pero nuestra experiencia no ha sido nada buena. Hemos ido familia con niños para disfrutar del fin de semana, pero la entrada tiene que ser el viernes a las 16, que finalmente conseguimos entrar a la 14 y la salida el domingo a las 12, como si fuera un hotel, no nos había pasado jamás que el domingo no nos dejen quedarnos a comer y disfrutar el domingo de la casa, ha sido de vergüenza, pagas un alojamiento que no es barato para solo poder disfrutar del sábado. Y tienes que irte con toda la comida el domingo a otro sitio para poder comer. Por otro lado tuvimos varios problemas más, el sábado, en plena preparación de la cena, se va la luz de toda la casa por una avería, la cual tienen que venir ellos a reparar a las 11 de la noche, y tardan más de una hora es conseguir devolver la corriente a la casa, lo cual hace que el sábado se nos estropeen todos los planes de cena al no poder cocinar y ser ya muy tarde. Esa misma noche después de conseguir recuperar la luz, se corta el agua de toda la casa Justo antes de irnos a dormir, sin poder usar baños, sin poder duch****, sin poder fregar. Y cuando se le comenta al propietario al día siguiente, su contestación, es “y yo que quieres que haga?”. Una pena, porque se ha convertido en un fin de semana corto, debido a sus horarios extraños para entrar y salir y con muchísimos inconvenientes ya que los suministros básicos de agua y luz no los tienen en correcto funcionamiento. No son capaces de rebajarnos ni un céntimo de todo lo pagado, una vergüenza de gestión. A la llegada te exigen 350€ a pagar mediante bizum a modo de fianza. Te cobran 50€ si usas la barbacoa y no la limpias. 8€ por una garrafa de agua. No lo recomiendo en absoluto.